«Mil veces tuve que estrellarme para darme cuenta que sí puedo volar.»
Me la envío mi amiga Eva, y adorna algún que otro túnel en el Camino de Santiago, solo encontré en Internet esta referencia, de donde sale la foto de esta entrada.
«Mil veces tuve que estrellarme para darme cuenta que sí puedo volar.»
Me la envío mi amiga Eva, y adorna algún que otro túnel en el Camino de Santiago, solo encontré en Internet esta referencia, de donde sale la foto de esta entrada.