«-Soy feliz. Jamás me he sentido tan bien, ¿y tú?
-¿Yo? Estoy de maravilla.
-¿Hasta el punto de llegar a tocar el cielo con un dedo?
-No, así no.
-¿Ah, no?
-Mucho más. Al menos tres metros sobre el cielo.»
[Tres metros sobre el cielo, Federico Moccia]
En el mundo hay miles de formas de declarar el amor, de dedicar unas palabras bonitas a la persona amada, de conquistar un corazón… A lo largo de nuestras vidas, a lo largo de los años, de los siglos, simplemente a lo largo de la historia se han dado posiblemente millones de formas de hacerlo. Se puede demostrar con gestos, con regalos, con muchas cosas… incluso unas simples palabras son capaces de derretir un corazón, de hacer sonreír a otra persona y de enamorar a cualquiera.
Personalmente, me encanta este pequeño fragmento del libro Tres metros sobre el cielo de Federico Moccia. Son unas palabras tan simples pero a la vez con tanto sentimiento y tan preciosas, que consiguen acelerar el corazón con solo leerlas. Al menos a mí. Y más aún cuando has tenido la oportunidad de leer la historia que se desarrolla alrededor de esas palabras, lo recomiendo a cualquiera que le gusten las historias de amor.
